Con la caída de la transmisión de COVID-19, las máscaras faciales ya no serán necesarias en los autobuses, trenes y otros vehículos de transporte público en el condado de Los Ángeles a partir de mañana, ni serán obligatorias en los aeropuertos y otros centros de transporte.

El condado de Los Ángeles era la única jurisdicción en el estado que aún requería las máscaras de transporte público. A partir del viernes, los revestimientos faciales solo serán "muy recomendados" en los vehículos y centros de tránsito.

La directora de salud pública del condado, Barbara Ferrer, dijo que las máscaras de tránsito seguirán siendo "fuertemente recomendadas" mientras el condado se mantenga en el nivel de actividad COVID "bajo" del gobierno federal y la tasa de infección semanal permanezca por debajo de 100 casos nuevos por cada 100,000 residentes.

Si la tasa supera las 100 nuevas infecciones por cada 100.000 habitantes, las máscaras volverán a ser obligatorias en los vehículos de tránsito. La tasa del condado a partir del jueves fue de 98 casos por cada 100.000 habitantes.

El cambio a la regla de enmascaramiento de tránsito coincidirá con la flexibilización general de las reglas de enmascaramiento del viernes en el estado y el condado. La flexibilización significa que ya no se requerirán máscaras en las instalaciones correccionales, refugios para personas sin hogar o centros de enfriamiento.

El condado de Los Ángeles también reducirá su guía general de uso de máscaras en interiores de "muy recomendado" a "preferencia individual".

Sin embargo, se seguirán requiriendo máscaras en los centros de atención médica, de atención a largo plazo y de atención para adultos/personas mayores. También se permitirá que las empresas y lugares individuales requieran máscaras en el interior si así lo deciden. Las personas consideradas con mayor riesgo de infección o enfermedad grave también deberían considerar usar una máscara en lugares públicos cerrados llenos de gente, dijeron las autoridades.

Las personas que comienzan a mostrar síntomas de COVID-19 o que han estado expuestas al virus también deben usar una máscara durante 10 días, según las pautas del condado. Las personas que dieron positivo por el virus pero son elegibles para salir del aislamiento después de seis días después de una prueba negativa también deben usar una máscara si regresan al trabajo o la escuela.

El condado ha estado experimentando tendencias a la baja en infecciones y hospitalizaciones por COVID durante semanas.

El jueves, la cantidad de pacientes con COVID positivo en los hospitales del condado de Los Ángeles cayó a 551, frente a los 573 del miércoles, según cifras estatales. De esos pacientes, 77 estaban siendo tratados en unidades de cuidados intensivos, frente a los 83 del miércoles.

Los funcionarios del condado han dicho que alrededor del 43% de los pacientes con COVID fueron hospitalizados debido a enfermedades relacionadas con el virus, mientras que el resto fue admitido por otras razones, y algunos solo se enteraron de que estaban infectados cuando se les hizo la prueba al ingresar.

El Departamento de Salud Pública del condado reportó otras 1,666 infecciones por COVID el jueves, elevando el total acumulado durante la pandemia a 3,444,630. También se cree que los números de casos informados oficialmente por el condado son bajos debido a la popularidad de las pruebas en el hogar, cuyos resultados generalmente no se transmiten al condado.

El miércoles también se informaron otras 12 muertes relacionadas con COVID, lo que le da al condado un número total de muertes de 33,519.

La tasa diaria promedio de personas que dieron positivo por el virus fue del 4,7% hasta el jueves.